martes, 12 de enero de 2010

VIENTO, LLUVIA Y NIEVE
















Este invierno que estamos atravesando esta siendo bastante completo en cuanto a incidentes meteorológicos que por otro lado no dejan de ser propios de esta época.










Desde el día 21 de diciembre al domingo 27 se habían registrado 242 litros por metro cuadrado en Cazalla. Si contamos desde el 1 de septiembre (inicio año meteorológico) hasta el 27, los litros registrados serian 434, un 13% más que la media histórica.





Tal cantidad de agua se ve reflejada en el caudal del arroyo que cruza la finca como en el nacimiento que alimenta la alberca. Ya en estos momentos la tierra es imposible que trague más lo que favorece el llenado de embalses. Tal cantidad de agua es el anuncio de lo que puede ser una primavera espectacular y un alivio para la flora, que es la gran sufridora de la falta de agua, en especial para las repoblaciones realizadas en varios puntos de la finca.










Pero en ocasiones el agua no viene sola, es acompañada por el viento, que ha provocado la caída de varios arboles, la mayoría olmos secos. Arboles que ya sabemos que aquí son lugar de alimento y nidificación para muchas aves, en especial los carpinteros. Concretamente uno de estos arboles que ha sufrido daños albergo durante la pasada época de cría a una pareja de pico menor, nido que posteriormente ocuparía un pico picapinos para dormir.










Y para que no faltara nada, este fin de semana aparecía la nieve, una nevada de 20cm según la Agencia Estatal de Meteorología, que dejaba Cazalla embuelta en un manto blanco y espectaculares fotografías.










Durante el día se podían ver las lavanderas blancas revoloteando bajo los olivos nevados o los mosquiteros moviéndose entre la vegetación de la alberca cubierta de nieve.





Con todo nevado, al caer la tarde varias aves buscaban lugares donde refugiarse, como la cuadra.










Dice el dicho que "año de nieves año de bienes", esperemos que así sea.